Desde este lunes, San Miguel de Tucumán da un paso adelante en su plan integral de movilidad urbana con la implementación de una nueva fase de control en los carriles exclusivos destinados al transporte público de pasajeros. Esta medida, parte de un esfuerzo por optimizar el flujo de tráfico y mejorar la eficiencia del sistema de transporte, promete traer cambios significativos a la circulación en la ciudad.
La iniciativa, coordinada entre diversas entidades municipales como el SUTRAPPA, la Dirección Operativa de Tránsito, la Subdirección de Transporte Municipal, la Patrulla de Protección Ciudadana (PPC) y el Centro de Operaciones y Monitoreo Municipal (COMM), tiene como objetivo principal garantizar el cumplimiento efectivo de las normativas establecidas para el uso adecuado de los carriles exclusivos.
Con el inicio de esta nueva fase de control, se advierte a los conductores sobre las consecuencias del incumplimiento de las regulaciones. Multas y otras medidas disciplinarias serán aplicadas rigurosamente a aquellos que no respeten las normas establecidas.
Esta medida refleja el compromiso de las autoridades locales de San Miguel de Tucumán para promover una movilidad urbana más eficiente y segura. Se espera que, con una aplicación efectiva de estas regulaciones, se logre un mejoramiento notable en la fluidez del tráfico y una mayor calidad en el servicio de transporte público para todos los ciudadanos.
“El 29 de abril comienza la plena aplicación del PIMU. Por lo tanto, a partir de esa fecha, vamos a salir a poner sanciones al infractor. Hace más de una semana estamos concientizando a las personas, pero a partir de esa fecha vamos a tener que poner sanciones fuertes a quienes incumplan las reglas”, aseveró con anterioridad el subdirector de Transporte de la Capital, José María Molina.
