En las últimas horas, fuertes tormentas azotaron localidades del sur de Tucumán, como La Cocha y El Rodeo (Graneros), provocando un aumento en el caudal de los ríos de la provincia. Además, las lluvias en Catamarca contribuyeron al crecimiento de los niveles de agua.
Según informó Ramón Imbert, subdirector de Defensa Civil de la provincia, las precipitaciones en la zona de pedemonte alcanzaron los 50 milímetros, según los registros de la Estación Experimental. “Fue una tormenta bastante fuerte, pero no hay personas en situación de evacuación”, aseguró el funcionario.
El Servicio Meteorológico Nacional mantiene a Tucumán bajo alerta amarilla, advirtiendo que la región será afectada por tormentas aisladas con abundante precipitación, actividad eléctrica intensa, granizo y ráfagas que podrían superar los 60 km/h. Se espera una acumulación de entre 30 y 50 milímetros, aunque localmente podría ser superior.
Defensa Civil confirmó que, hasta el momento, la situación está controlada y monitorean de cerca las áreas afectadas.
