El gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, inauguró este martes la primera etapa de las obras que incrementarán un 20% la potencia de la línea de alta tensión El Bracho-Cevil Pozo. Este aumento beneficiará principalmente a la zona norte y al área metropolitana de Tucumán, mejorando la disponibilidad de energía para la temporada estival. La inversión en esta obra supera los $7.000 millones, y se espera que para abril de 2025 la capacidad se duplique.
El recambio de conductores, parte fundamental de estas obras, permitirá que la línea pase de una intensidad de 600 a 720 amperios en esta primera etapa, y 1.200 amperios en la siguiente. El proyecto se enmarca en un plan de inversiones del Gobierno provincial y EDET, con el objetivo de mejorar el sistema eléctrico ante la alta demanda de energía en los meses de calor.
Jaldo destacó que, en menos de un mes, se habrán agregado 100 megas a la capacidad energética de la provincia, incluyendo otros proyectos como la instalación de dos turbinas en la Central Independencia que sumarán 50 megas más. “Estamos trabajando para dotar de mayor cantidad y calidad de energía a todo el territorio de Tucumán”, afirmó el gobernador.
Además, el interventor del ERSEPT, Ricardo Ascárate, precisó que la obra incluye un recambio de 17 kilómetros de conductores y sistemas de sujeción. Con esta mejora, Tucumán se prepara para enfrentar los desafíos de la temporada estival con un sistema eléctrico más robusto y preparado para posibles contingencias.
