En medio de la tensión por el dólar y su impacto sobre la inflación, el presidente Mauricio Macri decidió de manera sorpresiva dar un mensaje desde la Casa Rosada y anunciar que inició conversaciones para obtener financiamiento del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Fue un mensaje grabado, que se dio luego de que la divisa volviera a dispararse y llegase a los $24 este martes en algunos bancos pese a la batería de medidas que tomó el Banco Central la semana pasada.
Al comenzar su discurso, Macri informó que tomó la decisión de “iniciar conversaciones con el Fondo Monetario Internacional” para que le otorgue a la Argentina “una línea de apoyo financiero”.
“Estamos recorriendo el único camino posible” en lo que hace a la política económica que definió el Gobierno, sostuvo, “evitando unan gran crisis económica que nos haría retroceder”.
“Desarrollamos una política económica gradualista, para equilibrar el desastre que nos dejaron en las cuenta públicas, cuidando a los sectores vulnerables y creciendo”, agregó.
Explicó luego que la política tomada “depende mucho del financiamiento externo” y que si bien en los primeros dos años de gestión el contexto fue favorable, en la actualidad el mundo está convulsionado.
“Las condiciones mundiales están cada día más complejas: suben las tasas, el petróleo y se devalúan las monedas de los países emergentes”, enumeró a la hora de describir el contexto internacional.
“Frente a esta nueva situación y de manera preventiva, decidí iniciar conversacionse con el FMI para que nos otorgue una de línea financiera”.
“Hablé con Christine Lagarde”, dijo Macri a lo que añadió que “hoy mismo” comenzaron a trabajar “en un acuerdo” que fortalezca “este programa de crecimiento y desarrollo”.
Definió el apoyo como un “respaldo” para enfrentar este nuevo contexto económico.
Finalmente, en un mensaje muy corto, concluyó: “Cumpliendo con los compromisos y alejándonos de la demogogia y la mentira estoy convencido que el camino que tomamos va a lograr un mejor futuro para todos”.