La inflación mensual en Argentina fue de 2,7% en octubre a nivel nacional y de 3% en algunas provincias, según datos oficiales recientes. Aunque el número es más bajo de lo esperado por el consenso de economistas —que proyectaban un 3,1%—, sigue siendo alto para estándares internacionales, indicó el economista Mike Palau. Comparó el índice con países como Estados Unidos, que mantiene una inflación anual cercana al 2%.
Palau explicó que este proceso de “desinflación” significa que el ritmo de aumento de precios es menor, pero no que los precios dejen de subir. Según el economista, la inflación anual en Argentina sigue en torno al 40%, un índice elevado a nivel mundial, aunque menor al de los últimos meses. La inflación en servicios, que incluye actualizaciones de alquileres y salarios, es un factor que mantiene el índice alto debido a su componente inercial.
Además, Palau destacó el aumento salarial, especialmente en el sector informal, que tuvo un incremento significativo según el INDEC, con un 10% de crecimiento en septiembre. Esto es relevante ya que aproximadamente el 50% de la economía argentina es informal, señaló. A nivel general, los salarios han comenzado a estabilizarse, aunque a niveles bajos, recuperando lentamente el poder adquisitivo de noviembre de 2022.
El economista concluyó que, si bien Argentina está dejando de ser el país con mayor inflación a nivel mundial, el proceso de desinflación debe continuar y el gobierno busca estabilizar la economía. Sin embargo, Palau subrayó que la población espera una recuperación más dinámica, especialmente en el contexto de un índice interanual aún elevado.