Una vez que Fernando Rapallini dio el pitazo final, muchos ya comenzaron a armar el bolso con miras al reparador descanso que bastante merecido tienen tras haber sido uno de los planteles que más partidos jugó durante 2017.
Sin dudas que el gran objetivo para 2018 es la Libertadores, para seguir haciendo historia. Es por eso que dirigentes y cuerpo técnico ya tienen la mente puesta en los refuerzos.
El grueso del plantel regresó en el chárter contratado con destino a Tucumán para emprender el viaje a sus provincias de origen, en tanto que otros optaron por quedarse y viajar directamente desde Mendoza.
La Navidad no será una más para los Decanos. En la cartita que hinchas y dirigentes escribieron, sobresale con letras mayúsculas una Copa: la Libertadores. Este año faltó un poco de suerte.
