Un lunes complicado. Los tucumanos amanecieron con preocupación y molestia podría decirse, los hechos de inseguridad que ya no son sólo robos sino que ahora se cobran vidas humanas con frecuencia, son la constante de todos los días. El Estado no dio respuestas claras de cómo y cuándo se podrá sentir la presencia de una autoridad que comience a sentar una postura fuerte ante los hechos de inseguridad que se viven. Un taxista asesinado en Alderetes por una pareja de jóvenes fue el triste saldo del fin de semana. Los delincuentes fueron capturados y entregados a la policía con signos de linchamiento por los propios compañeros del taxista. Una gran parte de la sociedad avaló por medio de las redes sociales, donde circularon las imágenes, la medida que por suerte no terminó con la vidas de los malvivientes.
Otro tema que generó malestar fue el nuevo incrementó del boleto urbano de pasajeros seguido del Taxi. El pasaje que antes estaba en $ 9,35, ahora pasó a estar en $12,50. Si bien el uso del taxi ya es considerado un privilegio para algunos, esta modificación del precio hará pensar al usuario dos veces antes de subirse a un taxi. La bajada de bandera a partir de ahora tendrá un costo de $ 17 -al igual que en los ómnibus el incremento alcanzó un 30% de incremento-, en tanto que la “ficha” cada 100 metros, pasó de costar $ 1,30 a $ 1,70.
Los consumidores argumentan que sin desconocer el incremento del combustible existen otros factores que inciden de manera directa en la calidad del servicio, unidades sucias, sin aire acondicionado, con limitaciones para discapacitados que nunca intentaron mejorar, la frecuencia de los colectivos, entre otros aspectos, fueron los argumentos a la negativa del incremento del pasaje.
En fin, un combo de problemas graves sin respuesta del Estado en general, tanto legisladores como concejales se encuentran en la nebulosa sin reacción.
Foto: @lalo_cardozook
