El vocal del Ente Único de Control y Regulación de los Servicios Públicos de Tucumán (Ersept), Santiago Yanotti, expresó que la medida, ordenada por la Secretaría de Energía de la Nación y que comenzará a regir a partir del 31 de diciembre, afectará a las familias vulnerables que hoy se encuentran con problemas para abonar los servicios.
“A partir del 1 enero no hay más tarifa social, lo que tendrá un impacto en las 160 mil familias más pobres de Tucumán, que verán cómo se incrementan sus facturas entre un 30 y un 50%”, explicó Yanotti.
Aunque desde el Ersept orientan al usuario en cuanto a la eficiencia energética y el ahorro de energía, “queremos pedirle al Gobierno nacional que reconsidere esta medida, entendiendo que se viene el verano que es un período de alto consumo en el norte argentino. Pedimos que se revise la idea de eliminar la tarifa por las complejidades económicas y sociales que puede traer para las familias vulnerables”, agregó el funcionario.
Por su parte, José García, titular de la Federación de Organizaciones en Defensa de los Consumidores y Usuarios (Fodecus) sostuvo que llevarán el reclamo directamente a la Secretaría de Energía de la Nación. “Queremos hacerle entender a las autoridades nacionales que tienen que desistir de esta medida que afecta mucho a los usuarios y a la economía. Cuando implementaron el tarifazo dijeron que la Tarifa Social era para contener a las familias de escasos recursos. Es irrisorio que la eliminen”. (comuicaciontucuman.gob.ar)