Diego Maradona, entrenador de Gimnasia, estalló contra el arbitraje de Hernán Mastrángelo en la derrota por 2-1 ante Talleres en Córdoba, donde el local fue beneficiado con un penal muy polémico que desequilibró la historia. “Nació malo, es malo y va a morir malo”, afirmó.
“Tengo una gran amargura. Siempre hay suspicacias con los penales y ellos pasan al frente 2-1 con un penal, así no me gusta. Me gusta que dirijan bien para los dos lados”, señaló el Diez en diálogo con TNT Sports.
Además, disparó que “todos los roces eran para Talleres” y concluyó en que “así no se puede jugar”, pero se mostró esperanzado a pesar de una nueva caída del Lobo. “Acá no nos podemos relajar, todavía queda mucho”, cerró.
Como siempre que está Diego Maradona, es él quien se lleva todas las miradas. Así fue en Córdoba, a donde Gimnasia enfrentó a Talleres. A las 20:56 pisó el césped del estadio Mario Kempes y todos los celulares le apuntaron para quedarse con la imagen. El recibimiento fue con fuegos artificiales y una bandera gigante con él corriendo, que se descolgó desde la bandeja de la tribuna Roberto Gasparini. Se fue derrotado, pero aplaudido.