El transporte aéreo en Argentina enfrenta cancelaciones y demoras debido al paro de 24 horas convocado por gremios aeronáuticos y sindicatos estatales. La medida afecta a seis de los ocho gremios aeronáuticos, lo que ha llevado a Aerolíneas Argentinas a suspender vuelos y ofrecer opciones de cambio sin costo a los pasajeros afectados. Mientras tanto, Flybondi y JetSmart optaron por cambiar su operación de Aeroparque a Ezeiza, manteniendo algunos vuelos en ciudades como Tucumán y Neuquén.
El paro, impulsado por la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) y la Unión General de Asociaciones de Trabajadores del Transporte (UGATT), también afecta la recolección de residuos y el transporte de mercancías por carretera. Sin embargo, la Unión Tranviarios Automotor (UTA) descartó su participación, asegurando la continuidad del servicio de colectivos.
La Cámara de Líneas Aéreas en Argentina (JURCA) expresó su desacuerdo y señaló la falta de claridad en los servicios mínimos a cumplir, lo cual afecta la planificación operativa de las aerolíneas. Según el vocero de Aerolíneas, las opciones de cambio y reprogramación se encuentran disponibles en su sitio web o agencias de viajes, mientras que otras aerolíneas aconsejan verificar el estado de los vuelos.
En tanto, sindicatos como el de Camioneros anunciaron manifestaciones y ollas populares en distintas ciudades del país para expresar su malestar por la situación económica. La adhesión de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) podría impactar en organismos como la ANAC y el ORSNA, mientras que el líder de la Ugatt, Omar Maturano, enfatizó que “el 98% de los gremios del transporte” se adhirieron a la huelga.